jueves, 23 de octubre de 2008

La carretera


Acabo de terminar el libro de Cormac McCarthy que, si no me equivoco, ha sido premio pulitzer. Se titula "La carretera" (The road). En ella un padre y su hijo caminan sobre una tierra devastada por una guerra nuclear intentando sobrevivir siguiendo el único rastro uniforme que queda de la civilización: una carretera nacional.

Me ha parecido lo mejor que he leído en mucho tiempo. El eremita McCarthy, del que poco se sabe y alque nadie conoce el rostro, nos muestra el sentimiento que abate la humanidad con la llegada de la globalización. La era de la comunicación y la llamada por el Filósofo Manuel Castell "sociedad red" tienen en puntos comunes que lo malo y lo bueno sucede en varios puntos del planeta a la vez.

El ejemplo lo tenemos con la crisis financiera, en la cual se ha mostrado que mientras haya bonanza todo el mundo se apunta al carro del todo vale, pero cuando las vacas comienzan a flaquear...de repente surje la conciencia humana, la solidaridad... mi padre resumió todo esto con uno de los consejos mejores que me han dicho jamás: en los tiempos malos se echan los mejores amigos y en los buenos se pierden, hay que procurar mantener todo aquello que te ha hecho crecer a tu lado como un referente, y aquí incluyo a nuestros mayores que nos han ayudado a ser lo que somos con su esfuerzo y dedicación.

Cuando éramos pequeños siempre salíamos los fines de semana con la bicicleta y la consigna era la siguiente...cuando haya un llano todos en grupo y cuando llegue la cuesta arriba, cada uno que dé lo mejor de sí.

El caso es que el que llegaba antes a la cima siempre aflojaba para esperar a los mas rezagados...

¿Donde quedaron esos sentimientos?


Leed la novela, por favor.

martes, 14 de octubre de 2008

Llamada a la reflexión


Dicen que el fútbol es el opio del pueblo de este siglo que se nos viene encima...puede ser. Lo que está claro es que es una ventana, más bien con cristales tintados, de lo que se cuece en una sociedad. Pongamos un ejemplo: Italia.

El racismo que las políticas de Berlusconi ponen de claro manifiesto, viene dado por un gobierno legítimo votado en las urnas. Pero el fútbol se adelantó antes...en los estadios italianos pitan a todo jugador cuyo color de piel sea sospechoso, enarbolan banderas fascistas ante la parsimonia de las autoridades y sus jugadores celebran los goles con el saludo fascista...vegonzoso, pero bueno, estamos hablando de un país a la deriva gobernado por un individuo inepto que se atreve a decir que el mejor presidente de EEUU ha sido Bush y que la historia le pondrá en su sitio...algo así se cocía en el bunker de hitler poco antes de su suicidio ritual...

En España por lo menos no se pita al negro del equipo de uno, pero como dice Alfredo Relaño en la columna del diario As de hoy...eso no quita que sea racismo el pitar al negro del contrario...
La sociedad española lleva tiempo partida, y ya no es una cuestión de ideologías. Es una cuestión de cultura, de curiosidad, de autorreflexión...están los que intentan entender al árbitro y los que le vociferan cuando pita algo en su contra... tengo cariño al atlético de Madrid, pero en sus gradas he visto ese "insultar porque nos hace daño" por encima de lo que es ver el deporte con objetividad. Siempre hay una campaña arbitral contra nuestro equipo favorito, siempre nos designan al peor árbitro, siempre, siempre siempre... lo mismo en todos los campos de España menos en el de los grandes, que cualquiera los toca...

Eso es nuestro país, cuando la economía va mal, la culpa es de los inmigrantes que nos vienen a quitar el trabajo y que si no lo tienen se vuelven delincuentes....España es una sociedad forofa. Y así no se va a ninguna parte.

Por eso me parece bien, aunque hayan sido los hipócritas Ingleses, que el racismo como motivo de suspender un partido sea portada de los diarios deportivos...no me gusta que me regañen...pero a veces es necesario para hacerte reflexionar.